Hoy día 3 de marzo, 54 socias y socios de ADAYEUS, salimos a las 8,00 de la mañana de las paradas habituales, acompañados por Cristina, de Viajes Vefa, para dirigirnos a Villagarcía, a donde llegamos las 10,30 h, para ver la 59.ª edición del Concurso-Exposición Internacional de la Camelia que se celebra en la plaza de A Peixería y que regresa tras cinco años de ausencia, congregando a cultivadores de Galicia y del norte de Portugal.

El concurso nació hace casi sesenta años, en 1965, con la intención de popularizar una flor que tenía una indudable presencia en muchos pazos y se ha convertido en toda una referencia. Después de admirar durante un buen rato la exposición de Camelias que allí se encontraba, a las 11,30 h asistimos a una charla sobre las características y la realización del TÉ.

A las 12,00 salimos hacia la perla de la Finca Tremoedo, que es el precioso edificio de Bodegas GRANBAZÁN, con marcada influencia de Château francés y ahora recubierta de azulejos azules, haciendo un guiño a las casas indianas gallegas.  La bodega, de estilo neoclásico, está semienterrada y orientada al norte, protegida de los calurosos rayos del sol y rodeado de viejos parrales de albariño con temperaturas constantes y frescas durante todo el año. Las Bodegas GRANBAZAN fundadas en 1981, se encuentran ubicadas en el Valle del Salnés, en pleno corazón de las Rías Baixas (Galicia).
Es sin duda, uno de los primeros y más bellos châteaux de Galicia, donde los materiales nobles se funden con el paisaje y la arquitectura está al servicio de la mejor uva.

Allí nos esperaba Anabel, que nos explicó todo lo concerniente a la elaboración de los vinos, y nos enseñó las bodegas, de cuyas explicaciones quedamos encantados porque se nota que es una persona que vive su profesión.

Una vez finalizada la visita a las bodegas nos dirigimos a efectuar la cata de vinos en mesa, en donde catamos cuatro variedades de vinos; «Contrapunto» que es un vino joven, luego el segundo fue “Etiqueta Verde”, el tercero «Limusine», y por último el Godello. Nos quedamos con las ganas de probar el “Don Álvaro” que es la excelencia de esa bodega, pero casualmente no tenían ninguno en reserva. A parte de la cata, nos explicó la manera de tomar el vino, en boca, en lengua y después en estómago.

Por supuesto después de la cata nos entró a casi todos la «risa floja», y eso que los vinos fueron acompañados por sus aperitivos correspondientes, mejillones, cocidos en agua de mar, queso San Simón en una pequeña tosta, queso de Arzúa con membrillo y ya para coronar la cata, empanada de berberechos al albariño, todos ellos para tomar según el  vino que probábamos . En fin, que cuando llegó el cocido, junto con el pan casero, cocido en madera de abedul, por la Chef de la bodega, que dicho sea de paso estaba “BUENÍSIMO”, nos echamos las manos a la cabeza, ya que después de la cata, tan extensa, nos iba a costar trabajo terminarlo.  Y así fue, nos costó trabajo terminarlo, porque había que dejar sitio para el postre, consistente en unas cañitas y unas filloas.

Después de la comida volvimos a subir al autobús para dirigirnos a Cambados a efectuar una visita guiada. Una vez allí nos encontramos con la guía local, Romina, que en primer lugar nos explicó muchas curiosidades sobre la vida marinera de Cambados, a continuación, cruzamos el puente que llega hasta la torre de San Sadurniño, torre que en el siglo XI se reconstruyó y fue empleada como sistema de alarma, avisando mediante hogueras de incursiones vikingas, al contar con una ubicación estratégica de la ría de Arousa. Durante el siglo XII la volvió a reconstruir el arzobispo Diego Gelmirez e incluso se añadió una zona portuaria que impulsó el comercio en Cambados. Con el paso del tiempo siguió sufriendo reconstrucciones llevando incluso albergar una pequeña capilla dedicada a la Virgen María. Finalmente fue un terremoto en 1755 el que derrumbó definitivamente la torre.

Volvimos al Bus para efectuar una panorámica y finalmente hicimos otro recorrido a pie, por el interior de Cambados. (Pazo de Fefiñanes, Parador Nacional, y estatua de Asorey).

A pesar de que, en este último tramo del viaje, la lluvia hizo acto de presencia, ha merecido la pena todo el recorrido, y deseamos que todas y todos lo hayáis pasado tan bien como lo he pasado yo.

¡¡Muchas gracias y nos vemos en la próxima!!

 

Marisa Mauriz Barreiro

Presidenta ADAYEUS

 

Fotos: https://photos.app.goo.gl/3kPwr9nBSiKUHmzz5