Queridos amigos y amigas de la Universidad Senior:
A Coruña es una gran ciudad. También en momentos tan difíciles como estos lo estamos comprobando. Incluso a pesar del inmenso dolor que sentimos por aquellos que hemos perdido -en ocasiones sin una despedida acorde- y de las graves consecuencias económicas de esta pandemia de la Covid-19, nuestra ciudad ha dado múltiples ejemplos de solidaridad, de valentía, de generosidad. Sin una ciudadanía así -capaz también de poner en su sitio a la minoría que incumple, como en el caso de las terrazas- el futuro parecería mucho más sombrío. Sabemos que saldremos de esta, remontaremos, unidos y pasando momentos duros, por eso los presentes deben ser también días de esperanza. Como alcaldesa, así lo creo firmemente.
Desde el primer momento en que estalló la crisis, el Concello ha estado activo y con las personas como única prioridad, especialmente las más vulnerables. Se reforzó el trabajo de los Servicios Sociales, se atendió a todas las personas que pidieron ayuda, que fueron cientos, e incluso se instaló en tiempo récord un albergue para los sin-techo en el pabellón de Riazor. Además garantizamos de inmediato que todos los puestos de trabajo que dependen de las contratas municipales, que son 2.300. Reforzamos con éxito las modalidades de tele-trabajo, aceleramos inversiones municipales para ayudar a la recuperación, concedimos moratorias para pagar impuestos y ampliamos espacios públicos para que la ciudadanía mantenga la distancia a la hora de pasear. Y eso es solo el principio. En breve, se presentará un ambicioso Plan de Recuperación que también ofrecerá ayudas a autónomos y a sectores en peligro, que intentará no dejar a nadie atrás.
Todas estas medidas las tomamos sin desviarnos un milímetro de ese “mandato da amabilidade” que prometí al tomar posesión del cargo de alcaldesa. La interlocución con los vecinos pero también entre el gobierno local y la oposición ha sido fluido y fecundo, con buena disposición por todas las partes, lo que agradezco, como agradezco por supuesto el trabajo de los cientos de voluntarios, de policías municipales, bomberos, protección civil, sanitarios, trabajadoras, etc… cuyo esfuerzo y dedicación se han convertido en un ejemplo de lo que puede ser una sociedad fraternal, esa A Coruña de la que estamos orgullosos y orgullosas.
Nuestra ciudad, como Galicia, España y el mundo entero, puede ir sacando muchas conclusiones sobre lo que ha significado la pandemia. Hay un antes y un después. Pero ahora resulta incuestionable que debemos cuidar la Salud y la Sanidad pública, nadie puede dudar que la salida a esta crisis debe ser social y cuidar, sobre todo, a los que cuidan, muy especialmente a los mayores. El futuro pasa por una Política de Cuidados que, desde luego, el Ayuntamiento de A Coruña defenderá en todo momento. Es nuestra obligación dentro de una lucha que también debe acompañarse de la responsabilidad individual de cada uno. El virus sigue ahí. No perdamos el sentidiño. Nos jugamos mucho. Lo conseguiremos unidos.
Un abrazo.
Inés Rey. Alcaldesa de A Coruña