TORRE DE HERCULES, patrimonio de la humanidad.
Ayer, miércoles día 26, tuvimos la suerte de realizar una visita a la Torre de Hércules, programada para el miércoles pasado pero que fue suspendida por causas meteorológicas que obligaron a cerrar el monumento para el público.
La visita la realizamos en dos grupos. El guía extraordinario nos acompañó explicando el resultado de las últimas investigaciones realizadas en la excavación de los bajos de la Torre.
Estos estudios nos indican que posiblemente su construcción es anterior a la época que hasta ahora se creía y encontraron pruebas de que posiblemente data de mediados del siglo I.
«El arqueólogo José María Bello, director de las excavaciones realizadas en la Torre, señala que no existe ninguna referencia histórica que indique con precisión qué emperador tomó la decisión de levantar un faro en este punto de la costa, pero considera que no hay duda del origen romano del monumento, ya que califica de «bulo» que fuesen los fenicios quienes lo erigiesen. Bello no descarta, sin embargo, que antes de la llegada de los romanos existiese en el lugar algún tipo de señal para la navegación, pero no una torre.
Estima que el proyecto de instalación de una torre en A Coruña pudo gestarse en tiempos de Claudio y que tanto Nerón -quien promovió faros en Turquía- como Vespasiano mantuvieron su política hacia las tierras británicas, por lo que cualquiera de ellos podría haber sido el promotor de la edificación.
Los materiales más antiguos que aparecen en el entorno de la Torre pertenecen a esa época, pero el director del Museo Arqueológico calcula que quizás «son un poco tempranos» para corresponder al reinado de Claudio, por lo que el impulsor podría haber sido Nerón o Vespasiano.
Es un monumento firmado, que es algo extraordinario y todavía más en la época romana», comenta el catedrático de Historia del Arte Alfredo Vigo en referencia a la presencia del nombre del arquitecto Gaio Sevio Lupo junto a la Torre de Hércules, de la que dice que es uno de los monumentos españoles firmados de mayor antigüedad. Para este especialista, los romanos «eran conscientes de la importancia de lo que estaban haciendo, porque para ellos éste era un lugar tan remoto como para nosotros la Luna».
Pudimos ver las construcciones que hay debajo de la Torre escalones, piedras que podrían haber formado parte de la rampa exterior o del muro exterior, un muro de defensa que nos indica que en algún momento se utilizó no solo como faro, si no para defensa del ataque de asaltantes que venían por el mar. Restos de tejas y arcillas que nos indican que antes del faro hubo otros edificios cuyos restos quedaron debajo de los cimientos.
Se conservan tal y como se encontraron, en un lado de la excavación, una capa de sedimentos en cuyo corte se puede observar los distintos elementos que lo componen, pero se han dejado así para que se pueda seguir investigando cuando la ciencia tenga más medios para su estudio y así averiguar más cosas sobre nuestra ciudad.
Podríamos seguir escribiendo, pero lo mejor es darse un paseo de vez en cuando a la Torre y observar sus piedras, sus rocas, sus rincones nos hablaran de su historia y por qué está en A Coruña. TORRE DE HERCULES, patrimonio de la humanidad.
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